La verdadera bendición...

Día con día, hablo con muchas personas debido a mi trabajo fuera del ministerio. Y hay una palabra que escucho constantemente: "bendición"… —“Esto fue una bendición” —“Qué bendición este negocio” —“Una bendición económica”

Casi siempre, esa palabra viene vinculada al dinero. Pero… ¿y si te dijera que el dinero no es la bendición, sino una simple consecuencia?

La verdadera bendición de Dios es mucho más profunda.

La verdadera bendición es Él. La bendición de Dios es Su presencia. La bendición de Dios es el Espíritu Santo en tu vida. Es Su compañía constante, Su guía silenciosa, Su paz en medio del caos.

La bendición de Dios también son sus dones en ti, y el fruto de Su Espíritu brotando en tu carácter: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, dominio propio.

La verdadera bendición es ser llamado hijo de Dios, no por mérito, sino por gracia.

Y sí… La bendición de Dios también es la vida misma. Esa vida que, con todo y sus altas y bajas, con todos sus matices y colores, te recuerda que estás vivo por propósito y no por casualidad.

🌺 No confundas el dinero con bendición. Si así fuera, ¿qué diríamos entonces de aquellos que no tienen la misma capacidad de recibir dinero con la facilidad que otros?

¿Significa eso que no están bendecidos? ¡Por supuesto que no!

Dios nos socorre en momentos difíciles. Nos provee, abre puertas, coloca en el corazón de otros el deseo de dar o cubrir una necesidad. Pero el verdadero tesoro no está en lo que Dios da, sino en QUIÉN ES Él.

🔥 Más bien, sobre todo… busca Su Rostro. Porque de tu relación con Él, emanará tu verdadera felicidad.

--Rosemarie Luna  delamanodeDiosministries.org